Se trata de una precaria vivienda de zona sudeste que sufrió daños tras las fuertes lluvias. Allí reside una mujer con sus tres hijos menores de edad.
Como suele suceder cada verano luego de las lluvias, las consecuencias se sufren en los barrios más humildes. Viviendas precarias son afectadas por las condiciones climáticas y los posteriores daños que sufren las familias que allí habitan.
Es el caso de esta familia, compuesta por una madre y sus tres hijos, que habitan una vivienda en Barrio “Sita” que cuenta con dos habitaciones sin consolidar, levantadas con bloques, tarimas y chapas superpuestas.
Debido al temporal, la familia perdió mobiliarios y pertenencias. la Cooperadora Asistencial realizó la entrega de camas cuchetas, colchones, frazadas, bolsones alimentarios y kit de limpieza.