El viernes 4 de julio se inauguró en el Museo de la Ciudad la muestra “Ojo de Agua”, de la artista Mónica Villa, con curaduría de Cecilia Lutufyan.
La propuesta artística invita a realizar un recorrido sensorial por los Valles Calchaquíes, atravesado por la memoria emotiva. Las obras se distribuyen en tres salas del museo, donde los materiales, colores y formas construyen un hilo conductor que se despliega de manera orgánica.
En la primera sala se exhiben pinturas y objetos escultóricos realizados en arcilla roja. En la segunda, el espacio está dominado por una secuencia de textiles traslúcidos teñidos con vino, suspendidos desde el techo. Allí se encuentran también cuatro esculturas de cemento tituladas Ojo de Agua, Ojos de Vino, Ojo y Marca de Agua. En un rincón, un friso de tela pintado con tintes naturales y tinta china representa un mapa de viaje imaginario.
En la planta alta se presenta la instalación Brote en Agua, compuesta por cuatro cuencos circulares de metal dispuestos en el suelo, que orientan el recorrido del espectador. Cada uno contiene agua, arena de los Valles y pequeñas esculturas que evocan formaciones montañosas.
Entre otras obras destacadas se encuentran Cerro Zorrito, Mapas de Montañas, en un extremo Manantial, una escultura de metal oxidado que replica los círculos del suelo, y frente a ella, Doce Ojos, tres cubos realizados con placas de filtros de vino acompañados por un dibujo de pequeño formato titulado Quilmes, inspirado en las ruinas.
La exposición podrá visitarse hasta el 15 de agosto, de lunes a viernes de 9 a 19:30 horas, en el edificio histórico de La Florida 97, con entrada libre y gratuita.